Verano.

Verano. Que gran palabra, ¿a quien no se le dibuja una sonrisa en la cara al decirla, leerla, escucharla o tan solo pensarla? Es esa estación del año tan esperada. Quizá sea porque es simplemente eso; verano. Sin preocupaciones, sin ataduras, sin rutina. Verano.
Se me derrite el helado y se me quedan los dedos jodidamente pegajosos. Hay bichos.Muchos; moscas, mosquitos...bichos. Estos últimos se alimentan de mi sangre cada año. Creo que tienen coplejo de Edward Cullen. Hay fiesta, fiestas, muchas. De esas que empiezan de noche y sin darte cuenta ya está, se ha acabado, segunda estrella a la derecha todo recto hasta el amanecer. Y mientras pasa todo esto, ¡mierda!, me he vuelto a quemar.

  X.O.X.O     Ladywild.